Disuria

¿Cuáles son las causas de la disuria?

Entre las causas posibles se incluyen las siguientes:

• Infección con una bacteria o un virus, como una infección de las vías urinarias (IVU) o una infección de transmisión sexual (ITS)

• Sensibilidad o alergias a sustancias químicas, como las que se encuentran en lociones y otros productos

• Problemas de la próstata o de la vejiga

• Radioterapia en la zona pélvica

¿Cómo se diagnostica la disuria?

Su proveedor de atención médica lo examinará y le preguntará sobre sus síntomas y su historia clínica. Luego de hablar con usted y de realizarle una exploración física, es posible que su proveedor sepa las causas de su disuria, aunque también es posible que no lo sepa. Lo más probable es que necesite hacerse otras pruebas, como una muestra de orina. Las pruebas (análisis de orina) con esa muestra comprenden lo siguiente:

• Observar la muestra de orina (examen visual)

• Verificar la presencia de sustancias (examen químico)

• Observar una cantidad pequeña de la orina con un microscopio (examen microscópico)

Algunas partes del análisis de orina puede hacerse en el consultorio del proveedor. Otras partes pueden llevar a cabo en un laboratorio. También es posible que la muestra de orina se analice para determinar si tiene bacterias y hongos levaduriformes (urocultivo). El proveedor le dará más información sobre estas pruebas en caso de que sean necesarias.

¿Cómo se trata la disuria?

El tratamiento dependerá de la causa de su disuria. Si la causa es una infección por bacterias, es posible que le receten antibióticos. También podrían darle medicamentos para orinar más fácilmente y aliviar el dolor. Su proveedor de atención médica puede darle más información sobre sus opciones de tratamiento. Si no recibe tratamiento, los síntomas pueden empeorar.

Cuándo llamar al proveedor de atención médica

Llame a su proveedor de atención médica de inmediato si tiene alguno de los siguientes síntomas:

• Fiebre de  100.4 ° F ( 38 °C ) o superior, o según la indicación de su proveedor

• No hay mejoría después de 3 días de tratamiento

• Dificultad para orinar a causa del dolor

• Secreción nueva o en aumento procedente de la vagina o del pene

• Sarpullido o dolor en las articulaciones

• Dolor que empeora en la espalda o en el abdomen

• Agrandamiento doloroso de los ganglios linfáticos (bultos) en la ingle