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Prevention

Prevención de la deshidratación (niños)

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La deshidratación puede ocurrir cuando no hay suficiente líquido en el cuerpo. Esto sucede cuando la cantidad de líquido que se bebe o come es menor que la cantidad que se pierde.

Los niños pierden líquidos más fácilmente que los adultos. La deshidratación también puede ocurrir fácilmente cuando un niño tiene fiebre, diarrea o vómitos. Cuando un niño está enfermo, puede negarse a beber o puede beber menos de lo necesario.

Los signos de deshidratación pueden incluir:

  • Sed.

  • Agitación o más somnolencia que lo normal.

  • Menos orina (en bebés, esto significa menos de 6 pañales mojados por día).

  • Orina oscura con olor fuerte.

  • Boca seca y pegajosa.

  • Ojos hundidos.

  • Llanto sin lágrimas.

  • Cambio en el comportamiento.

  • Mareos.

Cuando su hijo está enfermo, controle la aparición de signos de deshidratación. Si observa alguno de estos signos, tome medidas para aumentar la cantidad de líquido que está recibiendo su hijo. Si su hijo no puede retener los líquidos o no mejora, llame a su proveedor de atención médica de inmediato.


Cuidados en el hogar

El proveedor de atención médica de su hijo podrá recetar medicamentos para tratar a su hijo. Siga todas las instrucciones al administrar cualquier medicamento a su hijo. Por lo general, no se administran medicamentos para la diarrea. Pero pueden administrarse para los vómitos. No le dé aspirina a su hijo a menos que se lo indique su proveedor. No le dé a su hijo ningún otro medicamento sin consultar primero a su proveedor.

Para un bebé o niño pequeño que tiene diarrea o vómitos:

  • Amamántelo o dele el biberón tan frecuentemente como su hijo pueda.

  • Los bebés amamantados tienen menos probabilidades de desarrollar diarrea grave. Muchos bebés amamantados pueden recibir suficiente cantidad de líquidos con la lactancia materna solamente. Pregunte al proveedor de su hijo si necesita usar una solución de rehidratación oral (SRO). Las SRO están disponibles sin receta en tiendas de comestibles y farmacias .

  • Su hijo puede rehidratarse al beber pequeñas cantidades de líquido con frecuencia durante 3 a 4 horas. Hable con el proveedor de su hijo para averiguar la cantidad correcta y el tipo de líquido que debe administrar. Un ejemplo sería que su hijo beba 5 cucharaditas de líquido por libra de peso corporal (50 ml por kilogramo). Se deberá interrumpir toda la alimentación durante este período. Se puede administrar una cucharadita cada 5 minutos hasta alcanzar la cantidad deseada. Si su hijo vomita, espere 30 minutos y luego adminístrele más líquido. Cuando le haya administrado la cantidad total , su hijo puede volver a su dieta habitual.

  • Observe atentamente a su hijo para detectar cualquier signo de deshidratación.

Para un niño más grande con diarrea o vómitos:

  • Dele líquidos a su hijo con la frecuencia que pueda tomarlos. Los líquidos pueden incluir agua, trocitos de hielo, refresco de jengibre, caldo o paletas heladas. Aumente lentamente las cantidades a medida que su hijo pueda retenerlos.

  • Administre a su hijo SRO, si se lo indica el proveedor de su hijo. Estas se encuentran disponibles sin receta en farmacias y tiendas de comestibles .

  • En el caso de un niño mayor, el niño debe beber 1 onza de líquido cada 20 minutos para rehidratarse.

  • Observe atentamente a su hijo para detectar cualquier signo de deshidratación.


Atención de seguimiento

Haga un seguimiento con el proveedor de atención médica de su hijo según se lo indiquen.


Cuándo consultar al médico

Comuníquese con el proveedor de atención médica de su hijo de inmediato si se presenta cualquiera de las siguientes situaciones:

  • Fiebre (consulte “La fiebre y los niños” a continuación)

  • escalofrío;

  • No puede retener líquidos debido a vómitos persistentes

  • Letargo o falta de respuesta

  • Ausencia de orina en 8 horas, o solo pequeñas cantidades de orina oscura

  • Dolor de vientre (abdominal) o dolor de cabeza que empeora

  • Llanto que no puede calmarse (bebés)

  • Diarrea sanguinolenta

  • Se niega a comer

  • Nueva erupción

  • Coloración amarillenta de los ojos (ictericia)

  • Vómitos de material de color verde o sangre 


La fiebre y los niños

Use un termómetro digital para controlar la temperatura de su hijo. No utilice un termómetro de mercurio. Existen diferentes tipos y usos de termómetros digitales. Estos incluyen:

  • Rectal. En niños menores de 3 años, la temperatura rectal es la más precisa.

  • Frente (temporal). Esto funciona para niños de 3 meses o más. Si un niño menor de 3 meses tiene signos de enfermedad, puede utilizarse como primer paso. Es posible que el proveedor desee confirmar con la medición de la temperatura rectal.

  • Oído (timpánica). La temperatura del oído es precisa después de los 6 meses de edad, pero no antes.

  • Axilar. Es la medición menos confiable, pero puede usarse como primer paso para controlar a un niño de cualquier edad con signos de enfermedad. Es posible que el proveedor desee confirmar con una medición de la temperatura rectal.

  • Boca (oral). No use un termómetro en la boca de su hijo hasta que tenga al menos 4 años de edad.

Use el termómetro rectal con cuidado. Siga las instrucciones del fabricante del producto para el uso correcto. Insértelo suavemente. Etiquete el termómetro y asegúrese de que no se use en la boca. Puede transmitir gérmenes de las heces. Si no se siente cómodo usando un termómetro rectal, pregunte al proveedor de atención médica qué tipo usar. Cuando hable con un proveedor sobre la fiebre de su hijo, dígale qué tipo de termómetro usó.

A continuación, se presentan pautas para saber si un niño pequeño tiene fiebre. El proveedor de su hijo podrá darle otras cifras para su hijo. Siga las instrucciones específicas de su proveedor.

Lecturas de fiebre en bebés menores de 3 meses:

  • Primero, pregúntele al proveedor de su hijo cómo debe tomar la temperatura.

  • Rectal o temporal (frente): 38 °C (100,4 °F) o más

  • Axilar: 37,2 °C (99 °F) o más

Lecturas de fiebre en niños de 3 meses a 36 meses (3 años):

  • Rectal, temporal (frente) o timpánica: 38,9 °C (102 °F) o más

  • Axilar: 38,3 °C (101 °F) o más

Llame al proveedor de atención médica en estos casos:

  • mediciones de temperatura repetidas de 40 °C (104 °F) o más en un niño de cualquier edad;

  • Fiebre de 38 °C (100,4 °F) o más en bebés menores de 3  meses

  • fiebre que dura más de 24 horas en un niño menor de 2 años;

  • fiebre que dura 3 días en un niño de 2 años o más.

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Author: Wheeler, Brooke

Online Medical Reviewer: Dan Brennan MD

Online Medical Reviewer: Liora C Adler MD

Online Medical Reviewer: Marianne Fraser MSN RN

Date Last Reviewed: 01/01/2025

© 2000-2025 The StayWell Company, LLC. Todos los derechos reservados. Esta información no pretende sustituir la atención médica profesional. Sólo su médico puede diagnosticar y tratar un problema de salud.

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